Bola de estambre, en el país de nunca jamás.

Que raro, el día de hoy leyendo me he dado cuenta que tengo el complejo de Peter Pan, todavía creo en las hadas y en el país de nunca jamás. Por que todavía creo y quiero creer, en el amor.

Pero también es raro, por que todo se empieza a complicar cuando uno se va enamorando. Porque cuando lo hacemos creemos que nos debemos dedicar por completo a agradarle a nuestra pareja. Entonces empezamos a exigir más tiempo; y nos esmeramos tanto para que sea un idilio perfecto o un romance de ensueño. Total que terminamos asfixiando y nos abandonan.

Y luego nos preguntamos: -¿Por qué, qué paso? Todo era perfecto- Y al dejar nuestra propia vida por invadir la cabeza y el pensamiento de la pareja, dejamos atrás nuestra individualidad, nuestra propia independencia.

Y esto acaba con recordarnos, lo que es estar solos. Y como nos desacostumbramos a ello, a nuestra propia soledad. Ahora nos causa dolor. Acabamos temiendo al compromiso, a la intimidad y hasta al mismo amor. Nos volvemos frívolos.

¿Para qué dedicar tanto tiempo a alguien que tal vez nos abandone? Porque volver a intentar algo, porque dedicarse a alguien con quien ni siquiera podría comenzar un noviazgo. Solo por hoy si quieres ahuyentar a tu amor, dedícate 100% a su pensamiento y sus acciones. No es raro, por que hasta mi me daría miedo y asfixia alguien que hiciera lo mismo.

Somos como gatitos, diría una vecina. Sí hechas una bola de estambre encima de alguno de ellos para convivir, se asustarán y se esconderán. Pero si hechas la bola lejos; correrán tras de ella. ¿Por qué somos tan contradictorios?

Hay veces que uno mismo es el que tiene miedo al compromiso. Porque amar hace sufrir. Porque se tienen exigencias inalcanzables con respecto al amor. Por que no nos damos permiso a querer a alguien mas que a nuestros padres o familiares. Por que no estamos dispuestos a sacrificar nuestra libertad para lograr cierto grado de intimidad. Por que tenemos una idea infantil de lo que es el amor; tal vez porque a veces es mas fácil la tranquilidad de la soledad. Nuestra soledad.

Sólo por hoy compartiré esto que me dijeron. El secreto es que tu sonrías, estés content@, y que no vivas quejándote por todo. Sí eres feliz, las personas a tú alrededor serán felices, incluyendo a tu pareja. Y evita estos malos hábitos.

• Evita vivir quejándote.
• No te obsesiones por la limpieza o las cosas perfectas.
• Demasiadas reuniones sociales o compromisos sociales.
• Salir juntos de compras.
• Hacer esperar a alguien mucho tiempo mientras te vistes, y mas si vas atrasado.
• Tocar la comida sin que te ofrezcan. Sobre todo las papas fritas. Me han contado.
• Descalificar a tu pareja enfrente de terceros.
• Pretender que tu pareja adivina tus pensamientos.
• Que nunca sea buen momento para un buen beso.

Y a volar por la tercera nube, a la derecha en la primera estrella. Campanita, por que allí es el país de nunca jamás. Polvo de hada, por favor. Y que no encontremos garfio alguno. No otro más.